Póngale usted el título que quiera – Gustavo Hernández
Imprime tu libro, publicar libro, imprenta de libros, librerías Gandhi, cómo imprimir mi libro, impresión de libros, servicio de impresión de libros en México, cómo publicar mi libro, cuánto cuesta imprimir un libro, cuánto cuesta imprimir mi libro, cuánto costará imprimir mi libro, quiero imprimir mi libro, quiero publicar mi libro, imprimir libros México, Groppe libros, impresión de libros económicos, publica mi libro Gandhi, cuánto cuesta imprimir un libro en una imprenta, pasos para publicar un libro, FIL Guadalajara, Cómo editar mi propio libro, imprenta Guadalajara, impresión a pedido, precios de impresión de libros, presupuesto online de impresión de libro, impresión de libros para autores independientes, quiero imprimir mi libro, impresión de libros precio, impresión de libros df, impresión de libros monterrey, impresión de libros Tepic, impresión de libros Colima, donde puedo imprimir un libro, impresión de libros baratos, quiero publicar mi libro en una editorial, ediciones Arlequín, arlequin.mx, editorial paraíso perdido, editorial independiente, cómo publicar mi libro en Amazon, David Izazaga, Yolanda Ramírez Michel, publicar libros electrónicos en Amazon, servicios editoriales, Ediciones de la Noche, Morfotec, Encuadernaciones López, Polytipo, Imprenta digital, Prometeo editores, editorial libros invisibles, Punto&Coma, punto y coma servicios editoriales, quiero publicar mi libro, imprimetulibro.com, editorial salto mortal, editorial Paraíso Perdido, Editorial Almadía, editorial Sexto Piso, Editorial Porrúa, cómo publicar con Porrúa, cómo publicar con Planeta, Cómo publicar con Random House Mondadori, cómo publicar con Amazon, cómo publicar con Alfaguara, cómo publicar con Caligrama, cómo publicar con Grijalbo, cómo publicar con Plaza y Janés, cómo publicar con Aguilar, cómo publicar con Lumen, cómo publicar con Harper Collins, libros de narrativa, libros de poesía mexicana, libros de crónica, libros de ensayo. editoriales en México para publicar mi libro cómo publicar un libro en una editorial cómo publicar un libro en México pasos para publicar un libro cómo imprimir mi libro cómo imprimir mi propio libro impresión de libros impresión de libros en Guadalajara impresión de libros en Colima impresión de libros en Tepic impresión de libros en Morelia
21787
product-template-default,single,single-product,postid-22592,wp-custom-logo,theme-bridge,bridge-core-2.9.0,woocommerce,woocommerce-page,woocommerce-no-js,translatepress-es_ES,ehf-footer,ehf-template-bridge,ehf-stylesheet-bridge,qodef-qi--no-touch,qi-addons-for-elementor-1.6.3,qodef-back-to-top--enabled,,qode-essential-addons-1.5.1,woolentor_current_theme_bridge,qode-page-transition-enabled,ajax_fade,page_not_loaded,columns-4,qode-theme-ver-27.4,qode-theme-bridge,qode_header_in_grid,woolentor-empty-cart,wpb-js-composer js-comp-ver-6.7.0,vc_responsive,elementor-default,elementor-kit-21147

Tienda

Póngale usted el título que quiera – Gustavo Hernández

$200.00

Póngale usted el título que quiera es una obra con al menos dos libros. En las páginas impares, el reto de empezar cada poema con el mismo verso nos descubre frente a un espejo donde somos la posibilidad que no fuimos: empezar por desconocernos, por querer ser otro, por ser ese otro y hablar con las plantas, por escribir los poemas que nos pasan, por ver el humo de las naves quemadas… en cada poema, un itinerario situacional y afectivo nos anticipa lo que las páginas pares nos iluminan con la misma frecuencia con la que nos oscurecen: en las pares, el poeta dialoga con un sí mismo que podría ser cualquiera de nosotros. Con el cronopio de sí mismo, con el alter ego, o con el desventurado Mateo haciendo una declaratoria de amor – odio para insistir en sus abismos.
En las impares navegamos de a muertito mientras lustramos el collar con el que nos encadenan, o nos atamos a la nave que ya zarpa en vez de quemarla, como el antónimo del héroe que somos en esta ciudad que no es nuestra, andando por calles que no nos llevan a ningún lado. En las pares nos preguntamos a dónde habremos de llegar entre ruinas, rosales y espinas, o nos percatamos de que, como en la vida, las cuentas nomás no salen. Y en ese diálogo, separado apenas por el puente de una hoja, reconocemos al poeta, a la pedacera de inicios que se ha vuelto de insistir en contrariar al pequeño Golem que lleva dentro. Reconocemos al cronopio-poeta, capaz de reiniciarse a cada nueva cagada de las que acumula varias al día.
Póngale usted… es un poemario que es dos o tres poemarios, y es también el relato de las tragedias cotidianas del hombre que –no está de más recordarlo- sonríe sus desgracias vallejianas con el hocico roto, blindado apenas por la palabra «paracaídas» y la bendición de Huidobro. Están aquí los milagros atemporales del mexicano universal que sobrevive a sus políticos con un «humorismo doloroso», y están aquí las recetas de autoayuda más inútiles (si es que hay libros de autoayuda que no sean inútiles) y más absurdamente bellas que podamos leer durante la mañana, cuando más necesitamos de resetear nuestra suerte. Para la ciencia, el cronopio que flota en los poemas de este libro es un reflejo anti humano, un paradigma de hombre cognitivamente no estratégico. Para los poetas –que están más cerca de la locura, y por lo tanto, de la verdad- este cronopio que carece de toda pericia vital es simplemente el hombre en su circunstancia de no ser cenzontle.
Póngale usted el título que quiera no es una Rayuela en su complejidad estructural, pero podría ser un changai, ese juego al que le bastaban dos palos, un hoyo en la tierra y tres formas de lanzar, tan lejos como fuera viable, la suerte del contrario; tan lejos que le fuera imposible acercarse a nuestros abismos. No es un libro que nos explique cómo hacer poemas; es un libro que nos explica cómo hacer poesía.

Categoría:
Descripción

Póngale usted el título que quiera es una obra con al menos dos libros. En las páginas impares, el reto de empezar cada poema con el mismo verso nos descubre frente a un espejo donde somos la posibilidad que no fuimos: empezar por desconocernos, por querer ser otro, por ser ese otro y hablar con las plantas, por escribir los poemas que nos pasan, por ver el humo de las naves quemadas… en cada poema, un itinerario situacional y afectivo nos anticipa lo que las páginas pares nos iluminan con la misma frecuencia con la que nos oscurecen: en las pares, el poeta dialoga con un sí mismo que podría ser cualquiera de nosotros. Con el cronopio de sí mismo, con el alter ego, o con el desventurado Mateo haciendo una declaratoria de amor – odio para insistir en sus abismos.
En las impares navegamos de a muertito mientras lustramos el collar con el que nos encadenan, o nos atamos a la nave que ya zarpa en vez de quemarla, como el antónimo del héroe que somos en esta ciudad que no es nuestra, andando por calles que no nos llevan a ningún lado. En las pares nos preguntamos a dónde habremos de llegar entre ruinas, rosales y espinas, o nos percatamos de que, como en la vida, las cuentas nomás no salen. Y en ese diálogo, separado apenas por el puente de una hoja, reconocemos al poeta, a la pedacera de inicios que se ha vuelto de insistir en contrariar al pequeño Golem que lleva dentro. Reconocemos al cronopio-poeta, capaz de reiniciarse a cada nueva cagada de las que acumula varias al día.
Póngale usted… es un poemario que es dos o tres poemarios, y es también el relato de las tragedias cotidianas del hombre que –no está de más recordarlo- sonríe sus desgracias vallejianas con el hocico roto, blindado apenas por la palabra «paracaídas» y la bendición de Huidobro. Están aquí los milagros atemporales del mexicano universal que sobrevive a sus políticos con un «humorismo doloroso», y están aquí las recetas de autoayuda más inútiles (si es que hay libros de autoayuda que no sean inútiles) y más absurdamente bellas que podamos leer durante la mañana, cuando más necesitamos de resetear nuestra suerte. Para la ciencia, el cronopio que flota en los poemas de este libro es un reflejo anti humano, un paradigma de hombre cognitivamente no estratégico. Para los poetas –que están más cerca de la locura, y por lo tanto, de la verdad- este cronopio que carece de toda pericia vital es simplemente el hombre en su circunstancia de no ser cenzontle.
Póngale usted el título que quiera no es una Rayuela en su complejidad estructural, pero podría ser un changai, ese juego al que le bastaban dos palos, un hoyo en la tierra y tres formas de lanzar, tan lejos como fuera viable, la suerte del contrario; tan lejos que le fuera imposible acercarse a nuestros abismos. No es un libro que nos explique cómo hacer poemas; es un libro que nos explica cómo hacer poesía.

0
    0
    Tu cesta
    ×

    ¿Dudas? Chatea conmigo

    ×
    Copy link
    Powered by Social Snap